El paseo Príncipe de Vergara

La plaza más emblemática de esta  ciudad comenzó a configurarse en 1757 como paseo publico fuera de las murallas que protegían   nuestra amada  ciudad. En 1809 fue ampliado con unas huertas pertenecientes al Seminario  del que ya  hablamos en otro  día, ubicado por aquel entonces en lo que hoy es la Delegación del Gobierno. El llamado "Paseo de las Delicias" o "paseo Extramuros" pasó a denominarse "Paseo de los Reyes" tras la nueva remodelación que sufrió en 1856, en la que se decidió colocar seis estatuas de piedra que representaban a otros tantos monarcas, esculturas regaladas a la ciudad por el General Espartero. Estas estatuas permanecerían en el paseo hasta la proclamación de la Segunda República, en 1931,  no esta muy claro si algunas de ellas están en Burgos o si solo es  un  rumor que   creemos.

 Tras la construcción del monumento al General Espartero se determinó nombrarlo "Paseo del Príncipe de Vergara", denominación que ha permanecido hasta nuestros días, pero que pocos utilizamos para decir verdad  . En el siglo XX; el Espolón sufrió dos importantes remodelaciones, una en los años 40 y 50 –en la que se incorporaron elementos tan singulares como "La Rosaleda",   que por cierto    se trajeron rosales de diferentes sitios del mundo   y que hacen de ese lugar un sitio increíble y precioso… con los estanques de "las ranitas"   aquí en este lugar los logroñeses y todos   en general siempre  fue  para todos  un sitio mítico para  nuestra infancia  quien no tienen  una foto de esos años en ese lugar   luego  la Concha o la gran fuente central que rodea a la estatua ecuestre de Espartero, y otra reciente  remodelación , en 1998  estando  de alcalde  Bermejo , en la que se peatonalizó una de las calles adyacentes… y donde   muchos bares abrieron  con gran éxito ,también se le dotó de mayor superficie verde e iluminación, además de acometer las necesarias obras de saneamiento y renovación del pavimento.

Monumento a Espartero. El elemento más representativo de esta plaza, la estatua ecuestre del General Espartero, que aún sigue erguida en el centro del Espolón, fue obra del arquitecto Luis y Tomás y realizada materialmente por el escultor Pablo Gibert. Su construcción se dilató durante años, fundamentalmente por problemas de financiación, pero finalmente fue inaugurada en 1872. La estatua y los cuatro leones que completan el conjunto monumental fueron fundidos con bronce procedente de cañones. La fuente que en estos momentos rodea a la estatua ecuestre fue construida a principios de los años 60.

La Concha. Este auditórium vino a ocupar en 1954 el lugar que con anterioridad tenía el antiguo kiosco de la música, obra del arquitecto Luis Barrón. Se construyó a modo de concha, siguiendo el modelo de otra que se había instalado poco tiempo antes en la ciudad norteamericana de San Francisco. Los motivos decorativos que luce La Concha en su parte más alta son obra del escultor Lucarini, autor también de las ranitas instaladas en los estanques de la Rosaleda. Hasta hace pocos años, la parte trasera de la Concha, a modo de pérgola, fue ocupada por varios comercios de gran tradición en la ciudad. Hoy este espacio completamente renovado es utilizado como Oficina de Turismo, inaugurada por S.A.R. el Príncipe Felipe.